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miércoles, 23 de septiembre de 2009

4-4-2, la variante del rombo

Era la variante más utilizada a finales del siglo XX y principios del siglo XXI. Es la variante ofensiva típica, se usa una defensa de 4 con dos centrales y dos laterales que subirán por la banda discontinuamente para sorprender a los defensas rivales y ejercer una posición más ofensiva para su propio equipo. Para acompañar a los centrales está el pivote defensivo que será el encargado de cerrar filas y cortar el juego rival, el que presionará al rival en sus contraataques y quien dará equilibrio al equipo. Acompañando a los laterales, en una función más ofensiva que defensiva, están los volantes o interiores, que serán los encargados de ocupar la banda en la zona del medio del campo; estos volantes o interiores son quienes sustituyeron a los antiguos extremos, encargados de sobrepasar a los laterales del equipo contrario para poder alcanzar la línea de fondo y centrar el balón al corazón del área. El último jugador del centro del campo es el pivote ofensivo o más comúnmente llamado enganche, que es el encargado de dar el último pase o lanzar disparos lejanos o desde la frontal del área. Por último, llegamos a los puntas, que dependiendo del equipo y entrenador encontraremos a un punta y un segundo punta o dos puntas puros; lo más lógico es utilizar a un punta y a un segundo punta para que puedan conjuntar sus diferentes habilidades y no que entre dos puntas puros se molesten entre sí al compartir similitudes tácticas y técnicas.

Los centrales deberán ser más posicionales que rápidos aunque lo mejor sería tener unos defensas centrales mixtos, es decir, rápidos y que se posicionen bien sobre el campo. Los laterales deben ser muy rápidos y no muy pesados para poder subir al ataque y luego recuperar su posición rápidamente. El pivote defensivo ha de ser el pulmón del equipo, es el jugador que mejor condición física tiene, o, al menos, uno de los mejores; será el principal encargado de ejercer las coberturas necesarias en defensa y bandas. Los volantes o interiores han de ser jugadores rápidos y muy hábiles con el balón, pues son los encargados de superar a los laterales del equipo contrario. El enganche suele ser el mejor jugador del equipo, es quien controla los tiempos del partido, quien da el último pase, quien decide si disparar o dar ese último pase o quien tiene más técnica. Los puntas suelen ser jugadores bastante completos, rematan de cabeza, disparan bien con ambas piernas, tienen una gran capacidad de reacción en situaciones límite y también suelen tener bastante técnica, puesto que se tienen que desenvolver dentro del área del equipo contrario.

Una de las tácticas más utilizadas con este esquema de juego es el contraataque, junto con el juego de bandas aunque no se explotará totalmente, dejando en multitud de ocasiones empobrecido el centro del campo con la subida de los volantes o interiores a posiciones demasiado avanzadas. A pesar de utilizar como táctica el contraataque, una táctica algo defensiva, lo ideal con este esquema es dominar el juego y llegar con facilidad arriba. Otra táctica más ofensiva es el juego por las bandas, que aunque no se explota convenientemente bien, se utiliza para llegar arriba con mucha rapidez y fluidez y evitar utilizar el 'patadón arriba'. Este esquema tiene una buena posición para que se utilice una defensa zonal en vez de al hombre, puesto que se cubren todas las zonas del campo con los jugadores del equipo y el repliegue es bastante rápido. Aunque el tema de las tácticas es muy subjetivo y personal del entrenador, que será, al fin y al cabo, quien se encargue de dictar a sus jugadores la táctica que utilizar.

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